En verano hay que disfrutar del jardín, pero las altas temperaturas hace que en estos meses los árboles y plantas necesiten más cuidados.

El cuidado del jardín en verano supone prestar mucha atención a las horas de riego y a la prevención de las posibles plagas e infecciones.

Aunque nuestro jardín necesita cuidados específicos durante todo el año, en verano aún más, ya que las altas temperaturas y la falta de lluvia pueden causar importantes daños.

Consejos para cuidar el jardín en verano

Regar a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde

El truco para que la tierra conserve mayor tiempo la humedad es regar a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde.

Si regamos en las horas de más sol, el agua se evaporará muy rápidamente y no hidratara el suelo.

Las plantas exóticas sufrirán más en épocas de calor, así que siempre que sea posible es mejor tener plantas autóctonas.

 

Mantenimiento de Jardines

 

Usar un buen abono

La mejor época para abonar nuestro jardín es en los meses comprendidos entre primavera y verano, ya que es cuando las plantas se encuentran más activas.

Es imprescindible para el mantenimiento de nuestras plantas y el cuidado del jardín en verano. Gracias a su uso se propiciará un mayor crecimiento y desarrollo de las plantas.

En función de su origen, hay dos tipos principales de abonos:

  1. Orgánicos: de origen animal o vegetal.
  2. Inorgánicos: de origen mineral.

Prevenir las plagas en verano

En verano es mejor prevenir que curar, ya es que la época del año cuando es más fácil que nuestras plantas se vean afectadas por plagas y enfermedades.

Hay que regar sin excesos, ya que un exceso de agua también puede provocar la aparición de hongos.

Debemos tener a mano algún tipo de pesticida, para utilizarlo antes de que unas plantas contagien a otras. Hay que estar muy atentos a las señales que nos indican si una planta está enferma o no.

El césped

El césped trae varias ventajas en verano, la principal es que aporta frescura en los días más calurosos. Parece que hay algún grado menos, lo cual se agradece.

Eso sí, hay que tener cuidado para no cometer errores en su mantenimiento:

  • No hay que cortarlo en exceso: ya que las raíces se debilitarían. Lo ideal es que mida cerca de 5 centímetros en todas las zonas, de forma regular.
  • No regarlo demasiado: no necesita demasiada agua, ni en verano. Es más, un exceso de agua podría provocar la aparición de plagas.  Simplemente hay que hacerlo en función de los tipos de césped.
  • Segarlo muy poco: hay que segarlo entre una y dos veces por semana, es algo fundamental. Así se absorberá mejor el agua y las raíces tendrán más fuerza.

Esperamos que os hayan sido útiles estos consejos de cara al mantenimiento del jardín en verano.

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