Cómo empezar paso a paso tu Huerto Urbano

¿Os ha entrado alguna vez el gusanillo de tener vuestro propio huerto urbano?

Llevas tiempo pensando en aprovechar el espacio en el balcón o en la terraza para intentar la aventura de crear un pequeño huerto urbano donde poder plantar tus propias verduras, frutas o hierbas aromáticas para cocinar.

En este artículo vamos a ver cuáles son los primeros pasos por los que debemos empezar para iniciar nuestra nueva actividad con bue pie.

Consejos para tener un huerto urbano en casa

Para empezar a crear nuestro huerto urbano debemos observar:

• La cantidad de luz solar que nos da en el balcón durante todo el día.

• La orientación de nuestro balcón o terraza influye mucho a la hora de poder cultivar ciertas hortalizas , lo ideal es tener un balcón orientado al sur ( en el hemisferio sur, debe ser orientación norte ), aun asi, en esto no vamos a poder elegir, así que tendremos que adecuarnos nosotros al espacio y cantidad de luz que recibamos

No os preocupéis si no hay mucha luz solar, hay muchas plantas que pueden crecer con algo de sombra o incluso si les toca muy poco sol directo.

• El acceso al agua es otro punto importante. Lo ideal seria poder poner algunos bidones para recoger agua de lluvia, pero si tenemos que usar el agua del grifo, es aconsejable dejarla reposar en un recipiente abierto unos dos días mas o menos para que se evapore el cloro y ademas el agua adquiera la temperatura ambiente.

Ya tenemos dos de los tres elementos imprescindibles para empezar, ahora solo nos falta un recipiente donde poder cultivar nuestras hortalizas.

Que recipiente usar para el cultivo

Botellas Pet, Cajas de Frutas, Bandejas de Poliespan

Por suerte, podemos utilizar un montón de elementos e incluso reciclar también muchas cosas, como botellas pet, tetra bricks,  cajas de frutas, o bandejas de poliespan ( muy aconsejables ya que se puede cultivar casi de todo y son muy fáciles de llevar y conseguir en fruterías o pescaderias ).

Lo ideal es que tengan como mínimo entre 20 y 30cm de profundidad para que las plantas se desarrollen correctamente, aunque no todas necesitan tanta profundidad, pero así abarcamos todas y nos curamos en salud.

Mesa de Cultivo

Otra opción interesante y si tenemos un poco mas de espacio es comprar o hacernos una mesa de cultivo, sinceramente con paciencia y si somos un poco manitas, podremos hacerla nosotros mismos con unos palets y así ahorrarnos un poco de dinero, es super sencilla y nos va a ser mucho mas cómodo para cultivar nuestras hortalizas.

Tierra y Abonos para cultivar nuestras hortalizas

El último punto a tratar para empezar es la mezcla que debemos usar para el cultivo de nuestras hortalizas. Además de tierra, vamos a necesitar nutrientes para que crezcan fuertes y den buenos frutos.

Las plantas necesitan, entre otros, tres nutrientes básicos: Nitrógeno, Potasio y Fósforo. Hay que preparar bien la mezcla, por ejemplo y para usar también materiales ecológicos, podríamos usar:

• 60% de Fibra de Coco
• 40% de Humus de Lombriz

Esta mezcla es muy ligera y mantiene muy bien la humedad. La fibra de coco es donde las plantas van creciendo y el humus de lombriz es de donde se alimentan las plantas.

Después de la mezcla, es interesante si podemos añadimos Vermiculita y Perlita. Nos ayudan a mantener retener los nutrientes y airear la tierra.

Empezar a Sembrar

Ya estamos listos para empezar a sembrar y cultivar, así que vamos a ponernos manos a la obra.

Antes de nada es importante consultar el calendario de siembra para saber que podemos cultivar en cada temporada o en cada momento y si estamos empezando en el tema y somos un poco novatos , lo ideal para empezar es cultivar cultivos de ciclo corto ( se cosecha en un mes o mes y medio ).

Estamos hablado de lechugas, espinacas o acelgas. Aunque también podríamos cultivar rabanitos, ajos, cebollas y poco a poco ir metiéndonos con mas cultivos.

Si después de todo esto , todavía os queda un poco de espacio en vuestra terraza y balcón, que mejor que aprovechar un rinconcito para poner una vermicompostera y fabricarnos nuestro propio abono con los restos vegetales de las casa y así al poco tiempo tener una fuente inagotable de humus de lombriz.